“La Jurisdicción y sus desafíos para el Siglo XXI” fue el tema central de las X Jornadas Nacionales de Derecho Procesal, que se realizaron los días 19 y 20 de octubre pasados en el Centro Cultural de la Municipalidad de San Pedro de Atacama, bajo la organización de la Universidad Católica del Norte, y que contaron con la participación de la docente de la carrera de Derecho de UDALBA Chillán, Constanza León.
El encuentro reunió a connotados académicos de la Universidad de Valparaíso; Pontificia Universidad Católica de Valparaíso; Universidad de Chile; Universidad de Talca y Universidad Andrés Bello, entre otras, junto a catedráticos internacionales, como Javier López Sánchez, de la Universidad de Zaragoza, y a autoridades como el Presidente de la Corte de Apelaciones de Antofagasta, Jaime Rojas Mondaca.
La exposición de la académica de la Universidad del Alba se tituló “Inteligencia artificial y proceso. Una breve defensa del factor humano”, ponencia que fue previamente seleccionada por el comité evaluador de las jornadas.
En su investigación, Constanza León aborda dos categorías de argumentos. Por un lado, se refiere a la dimensión económica, destacando cómo la inteligencia artificial puede acelerar los procesos y automatizar tareas repetitivas, y por otro lado, se detiene en el análisis de la objetividad de las máquinas en el manejo de datos y en su precisión al realizar predicciones.
Al respecto, León sostiene que “esta visión puede acarrear ciertos problemas si se aplica sin una mayor reflexión. A modo de ejemplo, en el caso del argumento económico, en algún momento se requerirá una gran inversión, no solo en aparataje estatal, sino también en la modernización de la administración en el sistema de justicia para la aplicación de estas herramientas, además de la adquisición de algoritmos para tareas específicas. Sin embargo, sobre todo, podríamos caer en un argumento utilitarista, ya que si una máquina tiene una precisión del 80 por ciento, habrá un margen del 20 por ciento de error, lo que podría resultar en decisiones incorrectas”.
“En cuanto al segundo argumento, lo que se subraya es que las máquinas no garantizarían la objetividad, dado que son diseñadas por seres humanos. Por lo tanto, teniendo en cuenta la legislación vigente en los países, especialmente en lo que respecta a temas de propiedad industrial, no tenemos forma de conocer los parámetros bajo los cuales se utilizan los datos ni de controlar si el programador de esa herramienta transmite sus sesgos a la máquina”, añade.
Asimismo, la académica destacó la importancia de poder participar en este tipo de espacios. “Para mí y para mi carrera, es un estímulo el haber tenido la oportunidad de participar en este congreso. En primer lugar, esto fue posible gracias a que una de mis ponencias fue seleccionada y sometida a arbitraje, lo que me permitió compartir conocimientos con doctores en Derecho. Es un honor haber estado a la altura de personas que ya tienen carreras consolidadas en el ámbito de la investigación, y esto de alguna manera refleja que el trabajo bien hecho recibe reconocimiento”.
“Representar a la carrera de Derecho –añadió- es de suma importancia, ya que posiciona de manera positiva a la Universidad del Alba a través de jornadas de alta calidad, reconocidas a nivel nacional. Además, es una oportunidad para demostrar que desde las regiones también es posible llevar a cabo investigaciones”, concluyó.