A partir de diciembre del 2021, Alejandra Arévalo Allende asumió nuevas funciones en el Campus Santiago, luego de casi seis años a cargo de la Vicerrectoría de la Universidad del Alba, sede Antofagasta. La autoridad académica se refirió a los grandes desafíos de la tarea que le fue encomendada por el Rector Rafael Rosell, así como las propuestas que trae del norte del país, con miras a instalar, de manera conjunta, nuestra casa central.

 

– ¿Cómo recibe este nuevo cargo?

“Con mucha alegría y también con responsabilidad. La Universidad del Alba ha definido su sistema de gobierno universitario como matricial. Esto quiere decir que hay una casa central, y existen cuatro sedes UDALBA dentro del país. Estas son Antofagasta, La Serena, Santiago y Chillán. Entonces, vamos a hacer la instalación de la sede Santiago. También lo recibo, agradeciendo la confianza del rector y del directorio, hacia mi persona en este nuevo cargo”.

 

– ¿Qué funciones cumplirá?

“Las funciones de un Vicerrector de Sede, excepto dos funciones por las cuales yo no me llamo Vicerrectora, que es la representación del Rector, porque obviamente el Rector está aquí, y lo que es la gestión de los campos clínicos. Entonces, por esas dos excepciones, no me llamo Vicerrectora, pero todas las demás funciones del Vicerrector de sede, las cumplo dentro de la sede Santiago”.

 

– ¿Cuáles son los desafíos del cargo?

“Tienen que ver con liderar este nuevo equipo de trabajo en la instalación de la sede Santiago. Vamos a lograr, y como objetivo, aumentar todos los indicadores de la sede Santiago, que tienen que ver con los indicadores a nivel académico, administrativo y financiero”.

 

– ¿Qué ideas trae para Santiago?

“Son dos pilares fundamentales para la instalación de la sede Santiago. El primero es el trabajo en equipo. Todas las áreas de la sede van a trabajar de forma coordinada, y otro pilar fundamental es la comunicación efectiva. Tenemos que entregarnos comunicación de lo que está pasando en nuestra sede Santiago con los estudiantes, que no actuemos como isla”.

 

– ¿Qué le encomendó el Rector Rafael Rosell?

“El Rector ha sido muy claro. Tengo que aumentar tanto los indicadores académicos, como la retención, la titulación oportuna. Tengo que desarrollar actividades de Vinculación con el Medio de la sede Santiago, establecer convenios para eso, dar un buen servicio al estudiante, una adecuada respuesta, una respuesta oportuna al estudiante, instalar la sede. Básicamente, que los valores de humanidad, inclusión y solidaridad se vean plasmados en el día a día”.

 

– ¿Qué ideas y propuestas trae de Antofagasta que podrían ser replicables?

“En Antofagasta trabajamos en equipo y desarrollamos la comunicación efectiva. Lo intentamos al menos, siempre hay algo que mejorar. La mejora continua es parte de nuestra política, pero básicamente, nosotros logramos aumentar en un 8 % la retención anual de la sede Antofagasta, gracias a un trabajo coordinado y sistemático, y realizando un seguimiento académico de los estudiantes. Aquí se logró un trabajo de la academia, de la Dirección de Asuntos Estudiantes, del área de Admisión, del área de Tesorería, donde logramos detectar a tiempo, por ejemplo, la deserción de estudiantes por factores económicos. Entonces, a esos estudiantes, les apoyamos económicamente, pero además les logramos hacer un seguimiento académico para que se mantengan con nosotros. Siempre es necesario apoyar a nuestros estudiantes. Tenemos que tenerlos siempre, como indica nuestro modelo educativo, en el centro de nuestro quehacer diario”.