Rafael Rosell Aiquel
Rector de la Universidad del Alba
La PAES: Sueños y realidades de la educación en ChilePublicado el 10/12/2024

294 mil inscritos se enfrentan a la rendición de la PAES, el examen para acceder a la educación superior…. Sueños, nerviosismos de los postulantes y de sus familias.

¿Pero cuántos de ellos se cumplirán?, ¿En cuánto hemos avanzado, no sólo para que nuestros estudiantes rindan la  prueba con éxito, sino en lograr, que ellos en su  formación en la educación media y por cierto en la superior, sean capaces  de procesar la enorme cantidad de información a la que tenemos acceso en nuestros días, y la transformemos en pensamiento crítico, es decir,  en conocimiento  creativo para tener éxito en una profesión y en la vida, más asumiendo la  responsabilidad  que demanda  nuestro país a quienes acceden a la educación universitaria?

Mucha tinta se ha derramado sobre la salida de los liceos emblemáticos del top 100 en los puntajes PAES. Si la Ley de Inclusión fue buena política pública o no, si primó el efecto par o no, si la inclusión del ranking terminó por beneficiar o perjudicar a los estudiantes de contextos más vulnerables, las cifras nos encaminan las respuestas:

De los 100 mejores colegios en el ranking de la PAES, 97 son particulares pagados.

En los 100 mejores colegios del ranking sólo hay dos de carácter estatal; hay 3 entre los 200 primeros, y varios muestran una continua decadencia.

¿Podemos quejarnos de todo esto o son los resultados de bajar de los patines, a los que se esfuerzan en sus estudios, a los que a pesar de las dificultades se atreven a vencerlas?

Hace décadas que no hacemos una reforma educacional que se enfoque en mejorar la calidad de la educación básica y media dentro de la sala de clases, entonces ¿Cómo esperar que ésta haya mejorado?

La receta segura hacia una educación estancada en las próximas décadas, la estamos viendo, colocando como prioridades: ¿Cómo enfrentar la condonación del CAE o el pago de la deuda histórica a los docentes? Todo muy legítimo, pero no se habla de educación.

De la reactivación educativa, sólo quedan los titulares en prensa y la calidad de la educación viaja en el vagón de cola.

Chile se va convirtiendo, año a año, en una gran fábrica de desperdicio de talentos, especialmente en los sectores más infraprotejidos. ¿Dónde está nuestro principal capital, para crear una sociedad de oportunidades, inclusiva, solidaria y humana?