Constanza León, docente de la carrera de Derecho de la Universidad del Alba sede Chillán, presentó su trabajo “Descifrando la justicia: implicancias de la transparencia de los algoritmos en la motivación de las sentencias” en el marco de las Primeras Jornadas Latinoamericanas de Derecho y Tecnología, realizadas durante la primera semana de septiembre en la Universidad del Desarrollo, en Santiago.

“Mi ponencia giró en torno a cómo la Inteligencia Artificial por una parte está facilitando el trabajo de los diversos actores en la justicia, y por otra en cómo nuestros estudiantes están interpretando las señales de un proceso evolutivo de la tecnología donde puede haber errores”, dijo la docente.

Y sobre el evento opinó: “todos los trabajos fueron de un gran nivel, lo que permitió abrir un debate que a nosotros los juristas nos gusta vivir en tiempos donde existen estructuras que desafíen el sistema”.

Constanza León comentó: “Aunque la Inteligencia Artificial se remonta a los años 50 con el trabajo de Alan Turing, las personas comenzaron en el siglo XXI a considerarla como una herramienta. Es interesante cómo el Derecho dialoga con otras disciplinas como la informática para que se pueda generar una IA fiable, respetuosa y, sobre todo, que se ajuste a los derechos fundamentales de las personas. A su vez, que esta no sólo abarque el cálculo u otros, sino que se oriente hacia un razonamiento, lo que se pone en tela de juicio en aquellas máquinas es si poseen autonomía, son libres y poseen características humanizadas”.

La profesional, además, durante su exposición explicó que “en el planeta existen secuencias de datos correlacionados en torno a una determinada situación, de los cuales se han establecido modelos predictivos para emitir un pronunciamiento judicial, lo cual quiere decir que si estamos frente a un delito de robo, la sentencia basada en IA debiese tomar la secuencia correcta: antedecentes del infractor, delitos de la misma cuantía y condiciones ambientales de la comisión del delito, entre otras, para que sea validada y pueda, por ejemplo, reducir procesos que sin la IA serían mucho más engorrosos y extensos”.