En una emocionante ceremonia, estudiantes de segundo año de Enfermería UDALBA Santiago vivieron la  Ceremonia de Investidura, última de las carreras correspondientes a la Facultad de Ciencias de la Salud en la sede.

Junto a sus familias, amigos y docentes, el grupo recibió la piocha que les identificará como profesionales de la salud en formación en los centros de práctica -campos clínicos-. Este hito, además, tiene lugar en la mitad de su carrera, por lo que es un momento esperado por todos los presentes.

Estudiantes de segundo año recibieron la tradicional piocha y juraron como futuros y futuras enfermeras.

La estudiante Tiare Tiague comentó que la ceremonia “fue muy linda. Nos dijeron que nos harían algo especial y fue mucho mejor de lo que pensábamos. Es un reconocimiento al esfuerzo y al conocimiento base que hemos adquirido durante la carrera. Ahora toca seguir complementando todo y afinar los detalles sobre lo que es la enfermería en sí”, añadió.

Su compañero Franz Ramos comentó que “estoy súper contento por mí y por todos mis compañeros. Se notan que están felices y eso es lo importante porque hay que esforzarse. Los reconocimientos hacen aún más especiales hitos como este”.

“Fue una ceremonia muy dinámica y fuimos una de las primeras generaciones post pandemia, entonces eso lo hace más especial. Esto es significativo porque te marca a través de tu carrera y, posteriormente, cuando se ejerza, uno siempre va a recordar este momento”, añadió sobre la investidura, que contó con la presentación de la cantante Aylin Ayala, tercer lugar del Primer Festival de la Voz de UDALBA Santiago, celebrado hace solo unas semanas en la sede.

La estudiante de Medicina y tercer lugar del Festival de la Voz, Aylin Ayala, animó al público con piezas musicales.

“MÁS QUE CONOCIMIENTOS Y HABILIDADES”

Entre los discursos de académicos y autoridades, la estudiante de cuarto año y presidenta del Centro de Estudiantes de Enfermería, Geraldinne Navarro, destacó la importancia de la carrera que tanto ella como sus compañeros y compañeras eligieron como un camino profesional.

“Nuestra carrera y este hermoso azul que nos representa son más que conocimientos técnicos y habilidades. Requiere corazón, compasión y una determinación inflexible de mantenerse firme, incluso cuando el peso del cansancio y las demandas son abrumadores. Es un llamado, una vocación que nos convoca a estar presentes en los momentos más cruciales de la vida de las personas. Somos los guardianes de la esperanza, los portadores de consuelo y la luz en los momentos más oscuros”, dijo en su discurso.

Geraldinne Navarro, estudiante y presidenta del Centro de Estutiantes de Enfermería.

Y añadió: “Cada una de nosotras ha elegido este camino lleno de desafíos, pero también de inmenso amor y satisfacción, porque detrás de cada batalla ganada, cada sonrisa recuperada y cada paciente cuidado, yace el corazón de una enfermera”.

“A medida que cada una de ustedes lleve con orgullo este uniforme, recuerden el honor y la responsabilidad que implica. Espero que este uniforme sea la insignia de un futuro brillante y lleno de servicio, y que sus caminos estén siempre llenos de luz, sabiduría y amor para quienes necesitan de nuestra atención. Gracias por escoger esta hermosa profesión, por ser luz en la oscuridad y por ser la inspiración de muchos”, cerró Geraldinne Navarro.